La Homosexualidad en la Adolescencia.

Muy buenos días, bienvenidos a una nueva entrada en el blog de #Protégete, hoy destinada a un tema bastante amplio de tratar y que seguramente nos dará para tratar en varias entradas: La Homosexualidad en la Adolescencia. 

Para todos los adolescentes el desarrollo es una labor que está llena de retos, expectativas y demandas. Y un aspecto bien importante es la definición de su identidad sexual. Todos los niños en diferentes formas exploran y experimentan su sexualidad como parte de su desarrollo normal. Este comportamiento sexual puede llevarse a cabo con gente de su mismo sexo o del sexo opuesto. La ansiedad respecto a la orientación sexual los lleva mucho a experimentar sin pensar o sin causarles preocupación. 

La homosexualidad es la atracción sexual persistente y emocionalmente hacia alguien del mismo sexo. Es una parte de la gama de expresión sexual. Durante la niñez y la adolescencia, por primera vez muchas personas se percatan de su homosexualidad o de su lesbianismo y pasan por experiencias de tener pensamientos y sentimientos homosexuales. La homosexualidad ha existido a lo largo de la historia y en diferentes culturas. Los cambios recientes en la actitud de la sociedad hacia la homosexualidad han ayudado a muchos jóvenes a sentirse más cómodos con su orientación sexual. En otros aspectos del desarrollo juvenil son similares en los jóvenes heterosexuales. Estos experimentan los mismos tipos de estrés, luchas, tareas y necesidades durante los mismos tiempos.

Los padres necesitan entender que la orientación homosexual no es un desorden mental. Las causas de la homosexualidad no están claras. Pero la orientación sexual no es un asunto de decisión propia. En otras palabras, las personas no escogen ser homosexuales o heterosexuales; no importa cual sea su orientación sexual, todos los adolescentes tienen la alternativa de escoger la expresión de decidir su comportamiento sexual y su estilo de vida.  

Pese al conocimiento y a la información que se maneja hoy en día a la homosexualidad y el lesbianismo, los adolescentes todavía tienen muchas preocupaciones, sobre todo lo siguiente: 

• Sentirse diferentes a sus compañeros y amigos. 
• Llegar a sentir culpa por su orientación sexual. 
• Preocuparse acerca de cómo pueden responder a su familia y a los seres queridos. 
• Ser objeto de burla y bullying por parte de sus amigos. 
• Preocuparse del SIDA y otras enfermedades de transmisión sexual. 
• Temer a la discriminación sí pertenecen a clubes, participan en deportes y la admisión a universidades y conseguir empleos.

Los adolescentes homosexuales pueden aislarse socialmente, separarse de amistades, tener problemas de concentración y desarrollar una pobre autoestima. También pueden desarrollar una profunda depresión. Los padres y otras personas necesitan estar alerta a estas señas de angustia ya que hay estudios recientes que dicen que los jóvenes gays y lesbianas existe un alto incidente de muertes por suicidio. O recordemos Sergio Urrego, joven que se suicidó y que ha impulsado una causa bien grande entorno a los derechos de los jóvenes. 

Es importante para los padres y tutores entender la orientación homosexual de los jóvenes y proveerles apoyo emocional. Los padres frecuentemente tienen dificultad aceptando la homosexualidad de los jóvenes por algunas de las mismas razones por las que el joven desea mantenerlo en secreto. A los adolescentes gays y lesbianas se les debería permitir decidir y a quién decirle sus orientaciones. Los padres y otros miembros de la familia podrían tener entendimiento y apoyo de organizaciones como la que tenemos en #Protégete. 

Los jóvenes que no se sienten cómodos con su orientación sexual o que no saben cómo expresarla pueden beneficiarse de recibir apoyo. Pueden beneficiarse del apoyo y de la oportunidad de clarificar sus emociones. La terapia puede ayudar al joven a hacer el ajuste de sus problemas y conflictos que surjan en el tema personal, escolar, familiar y social. La terapia dirigida específicamente a cambiar la orientación sexual no se recomienda e incluso puede ser dañina para un adolescente reacio. Puede generar aún más confusión y ansiedad al reforzar pensamientos negativos y las emociones con las que el adolescente se encuentra luchando en este momento. 

El respeto y la tolerancia debe imperar en la sociedad. La predilección sexual, depende de cada individuo, de cada ser humano que escoge el camino a su felicidad. 

No olviden que en nosotros pueden encontrar una ayuda para que tanto padres de familia como los jóvenes no se sientan solos y no tengan dudas sobre sus vidas y los momentos íntimos, para así lograr una mejor comunicación y convivencia. Nos pueden encontrar en twitter, en http://www.twitter.com/protegeteapp, en nuestra comunidad en Facebook en https://www.facebook.com/protegeteapp. Además en nuestra aplicación móvil para dispositivos Android con funcionalidades básicas https://play.google.com/store/apps/details?id=com.protegete.app.protegeteapp  . Igualmente nos pueden encontrar en nuestro canal de podcast dedicado a la sexualidad. http://www.spreaker.com/user/protegeteapp.

Y recuerda: Tu eres un ser único y nadie tiene derecho a decidir por ti, #Protégete. 

Muchas Gracias. 

De la Niñez a la Adolescencia.

Muy buenos días a tod@s, bienvenidos a esta nueva entrada en el blog de #Protégete, hoy dedicada a una transición normal: de la Niñez a la Adolescencia.

El paso de la niñez a la preadolescencia es un proceso de crecimiento necesario para el desarrollo humano, pero puede generar mucho estrés e incertidumbre en la familia. Está marcado por la aparición de los cambios físicos que dan comienzo a la pubertad. Las alteraciones corporales y hormonales son el inicio de transformaciones que vienen después, en términos afectivos, cognitivos, sociales y mentales que sufre el adolescente.  El niño inicia el rol más importante del adolescente: Buscar su propia identidad, acción que implica crisis y desequilibrio. 

Desde un punto de vista clínico es frecuente oir que los padres consultan sobre los jóvenes porque los observan distintos, y es normal porque ellos están experimentando cambios alrededor de los 11 y 12 años de edad. Ellos observan que su hijo se ha empezado a aislar, está con mucha rabia, de mal genio, corta mucho la comunicación y su rendimiento escolar no es el mejor. Tal vez los mimos que le gustaban antes ya no le gustan, rechaza a sus padres con brusquedad, y cuando le hacen preguntas responde con monosílabos. 

Los jóvenes no saben qué les pasa, muchas veces su mente está en blanco. Aparecen nuevas sensaciones corporales, nuevas vivencias y fantasías. Se sienten ambivalentes en el sentido que son curiosos y buscan satisfacer su placer y a la vez tienen susto, extrañeza y culpa. Los impulsos sexuales y agresivos invaden su mente y su cuerpo. Los jóvenes sienten impulsos sexuales y agresivos. Los jóvenes critican a sus padres, los desafían, los descalifica y todo para autoafirmarse. Los padres ya dejan de ser personas idealizadas y omnipotentes. El duelo respecto de los padres de la infancia implica una visión más realista de ellos. Es un trabajo psicológico importante para el logro de la propia identidad. 

Los padres de los jóvenes deben prepararse para la metamorfosis del hijo, ser capaz de contener la agresión y comprender la necesidad de los jóvenes. Ahora, el adolescente necesita saber que los padres podrán tolerar su agresión estando allí, haciendo énfasis con lo que significa esta crisis. A los jóvenes los calma mucho la presencia y la puesta de límites y normas de los padres, aunque defensivamente se muestren indiferentes. Es necesario tener compañía en forma cautelosa y cariñosa, ahí está la diferencia. Ni muy lejanos, ni muy cercanos. 

Es importante tomar en cuenta que tanto los hijos como los padres están viviendo una especie de duelo que requiere doble comprensión. El proceso de los hijos y hacerse cargo de las responsabilidades, rabias, angustias y descontentos que puede generar una nueva manera de relacionarse con su hijo. Como adulto es fundamental observar este tipo de emociones para no actuar compulsivamente. Los pensamientos deben ser maduros de ambos lados. Para el adolescente es esencial contar con padres pensantes, con buen manejo de sus propios impulsos. 

Los adolescentes suelen tener cambios emocionales fuertes, se sienten cohibidos. Y sí se acompañan con un fuerte cambio físico, el golpe emocional es más grande, lo que los hace volverse más sensibles sobre sí mismos. Se preocupan sobre cualidades personales o defectos que para ellos son algo muy importante pero para que otros son inconsecuentes.  También pueden envolverse mucho en sí mismos y puede creer que la única persona que piensa y siente así es él, o que tiene las mismas experiencias o que nadie lo puede comprender. Eso implica sentimientos de soledad y aislamiento. 

Pero esto puede también ser exagerado, en especial sus emociones. Es normal que los adolescentes cambien de ánimo, algo así como una segunda niñez temprana.Es importante recordar que estos cambios se deben a la forma en que ellos expresan sus sentimientos y no cambios a los sentimientos hacia su familia o a sus amigos. 

No olviden que en nosotros pueden encontrar una ayuda para que tanto los padres de familia como los jóvenes no se sientan solos y no tengan dudas sobre sus vidas y sus momentos íntimos, para lograr así una mejor comunicación y convivencia. Nos pueden encontrar en twitter en https://www.twitter.com/protegeteapp, en nuestra comunidad en Facebook en https://www.facebook.com/protegeteapp, y además en nuestra aplicación móvil para dispositivos Android con funcionalidades básicas. Igualmente nos pueden encontrar en nuestro canal de podcast dedicado a la sexualidad. http://www.spreaker.com/user/protegeteapp.

Y recuerda, la adolescencia es una etapa maravillosa, no te sientas sol@, #Protégete

Muchas Gracias.